Luego de que el Museo Van Gogh de Ámsterdam aprovechara su 50 aniversario para colaborar con Pokemon -el símbolo de la cultura pop japonesa-, generando un recorrido especial por la obra del artista que se exhibe de forma permanente y ofrece seis obras reinterpretadas con personajes de la tira, la institución neerlandesa tuvo que contrarrestar con una medida una suerte de colapso provocado porque los coleccionistas, deseosos de conseguir la carta que se entregaba al final del recorrido, generaban aglomeraciones que impedían la dinámica normal del espacio.
Para evitar los tumultos, el Museo Van Gogh decidió terminar la promoción de la tan deseada tarjeta que ahora se ofrecerá solo en la web del Pokemon Center para Reino Unido, Canadá y Estados Unidos.
La «alianza» entre Pokemon y Pikachu empezó el 28 de septiembre cuando la institución abrió sus puertas a Pikachu, Munchlax y Snorlax, en un acuerdo con los propietarios de la marca destinado a «llegar a nuevas generaciones». En ese marco se dio a conocer «Autorretrato», un sonriente Pikachu de protagonista colgado junto al cuadro real. O bien Snorlax y Munchlax en el Dormitorio en Arlés del pintor.
Antecedente
El 29 de septiembre, una multitud se agolpó en la tienda del museo en busca de la tarjeta de souvenir, mientras aduera ya funcionaba la reventa. Luego, la dirección decidió que ya no se servirían más cartas de Pikachu «por motivos de seguridad».
El museo evitó hablar de cifras y solo informa que fueron menos de 100.000 las cartas las entregadas.
«Debido una serie de incidentes en los que un grupo reducido de personas han creado una situación indeseable, hemos tomado la difícil decisión de no ofrecer más en el museo la promoción de Pikachu y Van Gogh», explicó en la web del museo sobre lo que sucedió con una muestra que durará hasta el 7 de enero.
Los artistas responsables de los cuadros inspirados en el pintor que se exhiben en las salas son de los ilustradores Naoyo Kimura, Sowsow y Tomokazu Komiya.
En eBay o Marktplaats, sitios destinados a subastas y comercio a través de internet, las tarjetas se ofrecían a principios de octubre entre 30 y 250 euros.