¿Buena o mala noticia? Los alumnos repiten menos y baja el abandono, pero no aprenden

¿Buena o mala noticia? Los alumnos repiten menos y baja el abandono, pero no aprenden

Algo había que hacer. El cierre masivo de las aulas durante casi dos años, por la pandemia, había dejado a muchos alumnos sin contacto con sus docentes. Sobre a todo, a los más pobres.

Las cifras de abandono escolar en la secundaria ya venían altas en el país desde antes del Covid y el panorama se presumía sombrío.

Ante este panorama, y sabiendo que repetir de año es la antesala del abandono escolar, las autoridades provinciales decidieron flexibilizar los regímenes de promoción: que los alumnos pasen de año con más materias previas y solo con los contenidos priorizados.

Hubo casos extremos, como Formosa que permitió a los alumnos acumular hasta 19 disciplinas sin aprobar.

El resultado de esta política puede verse hoy en las cifras que entrega un nuevo informe del Observatorio de Argentinos por la Educación, quienes recopilaron la información oficial sobre abandono escolar en los últimos 4 años y detectaron que bajó 9,3 puntos porcentuales en el país.

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Cada vez menos abandono


Comparación de la camada que tenía 17 años en 2018 con respecto a la que tenía 17 en 2022.




Tocá para explorar los datos





Fuente: OBSERVATORIO DE ARGENTINOS POR LA EDUCACIÓN
Infografía: Clarín

Pasó de 24,4% (casi un cuarto de los alumnos de 17 años) en 2018 a 15,1% en 2022. Todas las provincias redujeron la deserción escolar, aunque en distinta magnitud.

Para el análisis, los expertos pusieron el foco en la comparación de la información oficial de dos camadas de estudiantes reales. Los que tenían 11 años en 2012 y 17 en 2018 en relación a los que tenían 11 años en 2017 y 17 en 2022.

Los autores aclaran que, si bien las camadas son reales, hay una limitación en las estadísticas oficiales de las matrículas escolares, que están hechas al 30 de abril de cada año. No muestran si los inscriptos dejaron de ir a la escuela ese año o si después egresaron. Igualmente, se ve un marcado descenso en el abandono de los alumnos que se anotan con 17 años.

Esa baja se dio, en forma simultánea, a una caída también en el rendimiento escolar de los estudiantes. Lo muestran las pruebas Aprender de 2022, tomadas a quienes terminan la secundaria.

En Matemática, por ejemplo, 8 de cada 10 no alcanzaron los conocimientos básicos (cayeron 11 puntos porcentuales respecto a 2019). Y en Lengua el descenso fue de 4,7 puntos porcentuales.

Con la vara más baja

Los datos de deserción escolar y aprendizajes habilitan un debate acerca de la flexibilización de la repitencia y cómo lograr que los alumnos se mantengan en la escuela, pero aprendiendo.

“El aumento de las tasas de retención es un logro. Sin embargo, si los chicos no aprenden es una medida destinada a mejorar el control social no las posibilidades futuras de los chicos”, le dijo a Clarín la experta en Educación Guillermina Tiramonti.

Para Manuel Alvarez Thonge, presidente de Educar 2050, “el dato es auspicioso, pero hay que tener claro que es de fines de abril y que el último año de la secundaria para los estudiantes es complejo. Quienes llegan hasta allí enfrentar varios desafíos porque muchos no pueden dar las materias previas que arrastran y muchos también se llevan varias materias de este último curso y no logran egresar, le dice a Clarín.

“Los datos de egreso en tiempo oportuno en último año son difíciles de rastrear, pero el Informe Nacional de Indicadores Educativos de 2021/22 dice que, en escuelas estatales, 1 de cada 4 alumnos no promocionan, y en la privada 1 de cada 5”, agregó.

Para revertir la situación, Tiramonti propone “a corto plazo acordar con las provincias un plan de refuerzo de los saberes básicos de los alumnos”. “Mientras tanto hay que emprender cambios en la escuela media que modifiquen tanto las prácticas como los sistemas de evaluación. La no repitencia no quiere decir no evaluación sino evaluar de otra manera para permitir la permanencia y el aprendizaje”, sugirió.

Alvarez Thonge ofrece distintas recomendaciones. Entre ellas, armar un sistema de alerta temprana -que monitoree en tiempo real la asistencia a clases-, tutorías, planes especiales como los que se han desarrollado en provincias y que incentivan el desarrollo de habilidades críticas con cambios y diseños curriculares nuevos en lectura, matemática y ciencia, y un mayor vínculo escuela y trabajo, como la experiencia de CABA.

Bruno Videla, docente de secundaria, coincide con el diagnóstico: “Hoy los regímenes académicos son más flexibles y otorgan más oportunidades para que los alumnos puedan acreditar materias pendientes. Además, la escuela tiene la obligación de adaptarse a las distintas situaciones que pueden llevar a un alumno a no poder sostener la regularidad de la cursada. En este contexto, podemos deducir que la disminución del abandono escolar no es un resultado que podamos festejar con demasiado entusiasmo, porque pareciera que la causa es que se bajó la vara”, afirmó.

Por las provincias

El informe del Observatorio muestra que, en 2022, las provincias con mayores tasas de abandono acumulado para los alumnos de 17 años son Santiago del Estero (35,6%), Misiones (34,2%) y Formosa (28,9%). Del otro lado, con el menor porcentaje de abandono están La Pampa (3,6%), Tierra del Fuego (6,9%) y CABA (9,0%).

En el período analizado, el abandono escolar acumulado para los estudiantes de 17 años disminuyó en todas las provincias, aunque en distintas proporciones. Las mayores reducciones se dieron en San Luis (14,3 pp), Mendoza (13,3 pp) y Jujuy (11,1 pp). En cambio, La Rioja (4,5 pp), Chaco (5,5 pp) y Misiones (5,7 pp) son las que menos redujeron el abandono acumulado a los 17 años.

El indicador de tasa de abandono interanuall se arma a partir del porcentaje de estudiantes matriculados en un año de estudio que no se vuelve a matricular al año lectivo siguiente como alumno nuevo, repitente o reinscripto.

By Araujo Gomes Igor